De El Salvador a Quebec: lejos de casa pero feliz

Esta es la historia de una adolescente salvadoreña de arraigadas costumbres familiares y culturales, quien con apenas 17 años de edad decidió que su destino de vida estaba fuera de su país. Bien en Irlanda o en Alemania, ella sabía que debía prepararse en la universidad y, después de mucho evaluar opciones, incluso en Argentina, se decantó por el país más buscado por los estudiantes internacionales: Canadá.

Se trata de Andrea Sofía Jaco, su testimonio forma parte de la serie: Immiland - Proyecto de vida de nuestro blog y es una crónica inspiradora para muchos estudiantes internacionales que quieren un futuro mejor, pero no se han atrevido a dar el gran paso por creer que es imposible. A continuación, Andrea Sofía nos cuenta lo que vivió junto a su madre y lo que puede pasar en un proceso migratorio a Canadá, los hechos inesperados y cómo superarlos hasta conseguir la visa y entrar al país con éxito. Acompáñeme a leer su bonita historia.

Mi primera nevada. Este fue uno de los mejores días de mi vida porque me sentí feliz y con una paz enorme al darme cuenta de que estoy cumpliendo un sueño.

‍

La ilusión de estudiar en otro país

¡Hola! Mi nombre es Andrea Moreno, tengo 20 años y soy salvadoreña. Cuando cumplí 17 años, supe que debía tomar una decisión importante: escoger una buena carrera y una universidad que pudiera costear, para entonces cursaba el último año de bachillerato en mi país.

Yo tenía la ilusión de estudiar fuera de El Salvador, pero en casa no contábamos con los recursos económicos suficientes para semejante cambio, así que lo conversé directamente con mi madre y le pedí que buscáramos la posibilidad de una beca. Apenas si tenía dinero era para hacer mis maletas e irme, nada más.

Juntas armamos un plan de búsqueda y empezamos a evaluar diferentes opciones fuera de El Salvador, investigamos costos de estudio pero también las leyes migratorias de cada país, porque como extranjera de habla hispana sabía que debía estar informada sobre requisitos del idioma y de documentos cruciales para entrar a un país lejano y muy distinto al mío. 

En mi ilusión de estudiar afuera, busqué opciones en Irlanda, en Alemania, en Argentina y en Canadá. Este último país nos llamó la atención y empezamos a seguir a varios youtubers canadienses, la verdad es que nos gustaba mucho lo que veíamos. Seguimos explorando canales de YouTube y fue así como llegamos a Eddy Ramírez, abogada canadiense y fundadora de Immiland, una empresa registrada en Canadá que realiza trámites legales para emigrar al país. Nos detuvimos a mirar uno de sus videos y nos encantó la forma tan clara como explicaba el sistema migratorio y los pasos para estudiar en Canadá. Todo parecía indicar que mis ilusiones de hacer una carrera fuera del país serían una hermosa realidad.

Emigrar a Montreal se convirtió en una meta

Era abril de 2021 y yo continuaba con mi sueño de estudiar afuera y mis visitas al canal de YouTube de ImmilandCanada, allí estaba la abogada Eddy Ramírez con videos muy importantes sobre qué hacer antes de iniciar el viaje como estudiante y otros consejos  más. Al final, conversé con mi madre para agendar una asesoría con la empresa y así lo hicimos. Nuestra cita virtual fue con la propia Eddy Ramírez y debo decir que, si bien ella nos presentó las diferentes provincias y los colleges de Canadá que podíamos elegir, de acuerdo a nuestro perfil, en definitiva fue la pasión con la que describía y hablaba de Montreal la que me atrapó.

Entonces, investigué sobre esta ciudad ubicada en la provincia de Quebec, vi que la describen entre tranquila, vibrante, atractiva y mucho más económica para los jóvenes estudiantes y los recién llegados, en comparación con provincias más grandes como Ontario y Columbia Británica. Por esto y más, decidí que Montreal era la ciudad a la que quería emigrar. 

La aceptación al college fue el primer sueño cumplido

Desde el principio Eddy fue bastante optimista con nuestro caso y eso nos ilusionó más, teníamos prácticamente un año para lograr lo que ella nos decía, así que hicimos lo posible para entrar y salir de El Salvador y enriquecer mi historial de viaje, nos dispusimos a ahorrar dinero, buscamos opciones para aplicar a un préstamo estudiantil, etc. 

En diciembre del mismo año, yo ya tenía la aceptación de un college y en enero de 2022 contratamos los servicios de Immiland, yo aplicaría como estudiante internacional y mi mamá con una visa de turista.

Un revés inesperado en Quebec

En mayo de 2022, se enviaron ambas aplicaciones, pero en ese lapso de tiempo hubo cambios de ley en Quebec que no esperábamos… y el college al que había aplicado ya no ofrecía el permiso de trabajo posgraduación, mejor conocido como PGWP, con el cual el profesional graduado puede trabajar en Canadá y conseguir la residencia permanente. Me sentí devastada porque no sabía si afectaría mi aplicación; lo que tanta alegría me había dado ahora me generaba estrés, pero eso no fue todo, algo peor estaba por suceder…

Más desilusiones y un cambio de rumbo

Casi dos meses después me llegó un correo en donde me informaban que mi visa había sido negada, sentía que mi mundo se derrumbaba y lloré mucho, no aceptaba lo que me estaba pasando, por lo que acudí a Eddy Ramírez nuevamente para saber si se podía hacer algo a mi favor.

Ante esta negativa, el equipo de Immiland sugirió que se solicitara rápidamente la ATIP (Acceso a la Información Privada), esta es una reconsideración que se pide para entender por qué el oficial que revisó el caso decidió negar la visa. Mi madre y yo sabíamos que eso podía tardar semanas y hasta meses… 

Desanimadas por todo lo que estaba pasando, mi madre y yo empezamos a buscar información sobre cómo emigrar a Irlanda, ya que era el otro país que me hacía ilusión y lo mejor es que ahí no necesitaba visa, pero el desánimo siempre estuvo ahí, yo quería Canadá y hasta que tuviera una respuesta positiva de inmigración debía aceptar que aún no era posible.

Ante la incertidumbre no hay tiempo que perder

Algo que había visto muchas veces en el canal de YouTube de Immiland es que emigrar con éxito como estudiante requiere mucha preparación y lo más conveniente es elevar el perfil académico, hacer estudios, ganar experiencia laboral y aprender inglés y francés, por eso yo aproveché mi tiempo al máximo mientras esperaba la ATIP, trabajé en un call center para practicar mi inglés, estaba estudiando el segundo semestre en la universidad, también estaba aprendiendo a hablar francés y había obtenido un diplomado en Administración de Empresas. Nunca me quedé de brazos cruzados esperando que Canadá u otro país decidieran ni mis pasos ni mi destino. Aunque tenía mucha incertidumbre por la respuesta a mi reconsideración.

Apelar o volver a aplicar: una señal de luz

En octubre del 2022, llegó la respuesta de la ATIP con razones que no fueron muy claras, lo bueno es que estábamos actuando bajo la guía del equipo de Immiland y ellos nos plantearon dos opciones que podían aplicarse: una era apelar la decisión del oficial, la otra era volver a aplicar. Si bien había alternativas, la verdad es que no quería volver a aplicar por temor a un segundo rechazo, pero en medio de tanto caos llegó una señal de luz para nosotras.

A finales de ese mismo mes, mi madre recibió un correo en donde le informaban que su visa de turista había sido aprobada, eso nos dio esperanzas y lo vimos con una señal para ganar confianza e intentarlo una vez más. Así lo hicimos, ambas estábamos más preparadas en los pasos previos para emigrar, yo tenía un perfil académico atractivo, hablaba el idioma de Canadá, tenía experiencia de trabajo, en fin, habíamos construido una base para un visado temporal con más oportunidades de éxito, tal como lo recomienda Eddy Ramírez en sus videos. ¡Lo siguiente que nos pasó fue hermoso!

¡Visa aprobada!: mezcla de miedo y felicidad

Nuestro segundo intento también estuvo acompañado por el equipo de Immiland y en marzo de 2023 envié mi aplicación. Durante un mes y medio esperé ansiosa la respuesta ¡y esta vez mi visa sí fue aprobada! Lloraba de felicidad, pero a la vez tenía muchos sentimientos encontrados. 

Con los días, empezaron a surgir miedos, pensaba en el hecho de estar sola, lejos de mi madre y de mi abuelito. Tenía una mezcla de felicidad por iniciar mi sueño y de melancolía por lo que dejaba atrás, en definitiva, saber que tenía la visa aprobada me generó ansiedad y otras emociones más. 

Les conté a mi familia cercana y a mis amigos que me iría a Canadá, unos me apoyaban y mostraban confianza en mí, otros pensaban que era muy joven aún para emigrar sola, pero, pese a las diferentes opiniones, yo igual estaba feliz.

Del boleto de avión a la llegada en Montreal

Con las dos visas aprobadas, mi madre y yo empezamos a preparar el viaje. Durante toda la fase de aplicación habíamos estado leyendo el blog de Immiland Canadá, ya que tiene muchos artículos interesantes que hablan sobre los pasos antes y después de llegar a Canadá, así como lo que se hace en el aeropuerto. Sabíamos que ver opciones de alojamiento era crucial antes de comprar los boletos de avión, ordenar nuestras maletas y hasta guardar la documentación importante, como el permiso de estudios y la carta de aceptación, en un bolso de manos al momento de llegar al aeropuerto.

Fue un domingo 23 de julio de 2023 cuando llegué con mi madre a Montreal y desde ese día me enamoré de la ciudad. A pesar de la desilusión que casi me hizo tirar la toalla, considero que Dios me ha bendecido mucho porque encontré el apoyo incondicional de las personas que nos alojaron en sus casas. A todas les quiero transmitir mi respeto, aprecio y agradecimiento por recibirnos y por ayudarme a encontrar un buen empleo, con una jefa maravillosa y excelentes compañeros de trabajo.

Además, en el college conocí un grupo de amigos encantadores que poco a poco se fueron convirtiendo en parte importante de mi vida, tanto como mi familia en El Salvador. Yo sé que ellos me esperan allá con los brazos abiertos, sé que me aman y yo a ellos. 

Hace un año ya que vivo aquí en Montreal y, a pesar de que a veces lloro por estar tan lejos de casa sin mi familia, trabajando todos los días para mantenerme económicamente y no generarles preocupación ni problemas, ¿por qué no decirlo?, sé que todo este esfuerzo vale la pena y me siento muy feliz.

Doy gracias a Dios por esta oportunidad, a mi mami por su apoyo y a Immiland por el acompañamiento, a ustedes por leer estas líneas y, finalmente, ¡le doy las gracias a Canadá!

Andrea Sofía Moreno Jaco

En estos enlaces, compartimos información relacionada con esta historia, así como algunos videos y artículos del blog que inspiraron a Andrea Sofía a lograr su sueño.

Residencia permanente por estudios en Quebec, posibles cambios de ley, ver video.

¿Qué es lo primero que hago cuando llego a Canadá?, leer blog.

Visite nuestro sitio web para Servicio de visa negada (ATIP). Ver otros servicios migratorios.

‍

Con amor,

‍

Immiland Education

‍